Mas sabe el diablo...

Todo sobre mi madre

En el año 1935, con unos meses de vida, su madre la dejo en casa de un joven matrimonio vecino para ir a comprar. Nunca volvio a por ella. A medida que fue creciendo, creyo que su vida era normal, con unos padrastros que la querian; hasta que se dio cuenta de que sus hermanastros iban al colegio en lugar de a la fabrica de jabon donde ella trabajaba. Entonces solo le quedo uno de ellos, el pequeño, que repartia con ella la merienda que le ponian en la cartera en la Barcelona de la posguerra. Y asi siguio hasta cumplir los 16 años, cuando conocio a un charnego llegado de niño de un pueblecito de Albacete, con el encanto y el desparpajo de quien a los 10 años ha sido leñador, vendedor ambulante por los cortijos manchegos, y avanzadilla y escudo contra la guardia civil de un grupo de estraperlistas. Tres años despues, se caso con ese muchacho, en contra de la voluntad de sus padrastros por cuestiones de "raza", y con un ojo hinchado porque la tarde antes de su boda se quedo celebrando su despedida con sus compañera de trabajo y se salto en poco mas de media hora su toque de queda. Toda infraccion conlleva una sancion. Su viaje de bodas, consistio en ir al cine a ver una de vaqueros y duro hasta las 6 de la madrugada siguiente, cuando desperto en casa de la familia de su marido recien estrenado. poco tiempo despues, entre peleas con las cuñadas por un fogon de la cocina, perdio a quien hubiera sido su primera hija en el parto... y despues otra y otra... hasta 5 veces... 45 gestando muerte... a la quinta la oyo llorar, vio su bonita cara y su cuerpo desfigurado. Despues paro. Le dio un nombre y la niña fue bautizada antes de ser enterrada. Ella paso de la sala de partos al ala de psiquiatria, donde permanecio 6 meses antes de ser capaz de reconocer a nadie. Pero deseaba un hijo mas que nada en el mundo y su sexto embarazo lo acogio con tanta ilusion como miedo. En el octavo mes de revisiones su medico le pregunto " ¿ tiene usted dinero para pagar una cesarea ? ", " No ", " Entonces su hija morira ". Su desconsuelo y sus lagrimas fueron tales, que otro medico de ese centro se intereso por ella. A la semana siguiente nacio su sexta hija, y vivio. Cuatro años mas tarde, acudio al medico que le habia devuelto la alegria y este le pregunto " ¿ Tienes ya dinero para pagar una cesarea ? " y ella asustada volvio a responder " No ", " No te preocupes, no es para mi. Es para saber en que hospital nos veremos ". Su segundo hijo, un niño, vino con un pan debajo del brazo. Las cosas fueron bien. La familia crecia feliz. Economicamente, bueno..., pasaron de vivir con toda la familia, a la zona alta de Barcelona, con coches deportivos, casas en la playa... 6 años despues, el embarazo de rebote. De nuevo a su medico. Y de nuevo la pregunta. Ahora respondio " Si ", y el le dijo " Estupendo, pues ahora me pagaras los tres ". Fue el dinero que mas a gusto gasto jamas. Fue una epoca feliz para ella. Pero los ciclos terminan. El dinero como vino se fue. 5 vidas cambiaron por completo. Deudas, amenazas, necesidades a cubrir... una cuñada le dijo que ya era hora de que le pasara tambien algo malo a ella. Volvieron a ser años duros hasta que las cosas se estabilizaron en una relativa tranquilidad. Un dia, su madrastra murio, y ella lloro porque la queria. Su padrastro sobrevivio a su esposa unos meses, y ella volvio a llorar. Y su hermanastro pequeño, al que mas queria, le dio su parte de la herencia: un juego de cafe. El resto de las cosas eran para los " hijos de verdad ". Menos mal que siempre tendria algo realmente suyo de verdad: a sus tres hijos. Pero " siempre " es mucho tiempo, y en el plazo de tres meses, caso, velo y enterro al pequeño. Y esto ya fue demasiado para ella. Su corazon se rompio. Se rompio de verdad.

¿ Y por que os cuento esto ? pues porque comentaba en el post anterior, cuando saque mi caja magica, estuve intentando liarla para colocarle un cigarro de la risa traicionero. No tengo ni idea de si podia haber sido peligroso para alguien con un marcapasos recien puesto, pero parti de la idea de que si lo era, y aun asi tome la decision de aceptar las posibles consecuencias. Porque ya no recuerdo como era su risa. Hubiese dado cualquier cosa por verla reir. Hubiese aceptado la responsabilidad de lo que le hubiese ocurrido, por verla feliz una vez mas, en lugar de aferrada a mi pequeño Deseo que es la viva imagen de su hijo pequeño. No se...,a pesar de lo que alguien puediera pensar, no creo ser un mal hijo. Mañana no os olvideis de echar la carta a los Reyes Magos, y de ser felices como querais.